Diáspora SJ: San Miguel – Iván Dobson SJ

Un agitado octubre ha vivido nuestro compañero entre estudios de filosofía, guiar Ejercicios Espirituales, acompañar pacientes en el hospital y otras historias más que podrás leer en esta nueva Diáspora SJ.

Es lunes, camino por avenida Corrientes y Callao, y me pregunto junto a Florencio Escardó, “¿en qué esquina te encuentro Buenos Aires? En la esquina de Sábato y Pichuco o en la esquina de Borges y Carriego”. De pronto, comienzo a hacer memoria de lo que ha sido este tiempo y pensar en la “DiásporaSJ”.

Han pasado más de 190 días desde mi último escrito y sin dudar ni poder dudar, el que se acontece, ha hecho ”extraordinario” lo “ordinario”. Ahora ya estamos concluyendo las clases regulares. De hecho, el 13 de noviembre comenzamos los exámenes. Mas, indistintamente de los resultados, mi sensación es de agrado. Sin espacio a duda, la física y la matemática me ayudan en el estudio de la filosofía. Recuerdo que en la edición de abril les contaba de mi esfuerzo por leer a Heidegger en Metafísica. Si bien es cierto, hoy sigo dedicándole mucho tiempo para leerlo, pero la frustración dio paso a una motivación a profundizar, siguiendo el consejo de Gardel. A saber: ¡Adelante de tu vacilar, sin temor, a pelear!

En ese sentido, considerando el cierre de año, el apostolado está siendo como los glóbulos rojos para mi vocación religiosa, y me recuerda el sentido de mis estudios.

Octubre ha sido un mes movido. Les enumero un poco los fines de semana: Guiar Ejercicios para los jóvenes de la CVX de la capilla, luego Triduo de renovación de votos, el siguiente, acompañar Ejercicios para los adultos de la parroquia. Recién en el cuarto fin de semana pude volver a lo cotidiano, es decir, acompañar pacientes en el hospital por la mañana, por la tarde MEJ y CVX.

El traslado a Córdoba es un fenómeno que irrumpe. No nos deja indiferentes, tanto en los estudios como en el apostolado. Se acerca fin de año y las personas que nos comentan su pena por nuestra partida van en aumento. Se mezclan los sentires, pero, con todo, confiamos en que Dios seguirá con ellos.

Las fotos que les comparto son del encuentro de filósofos de la CPAL, la comunidad de estudiantes (juniores y filósofos) y con un grupo de chicas de la CVX de la capilla. La vida en San Miguel ha transcurrido con “relativa tranquilidad”. Lo pongo entre comillas, porque si bien la rutina se ha mantenido sin mayores sobresaltos, el hecho de que se avecine el término del año, con el periodo de exámenes y, más aún, con el pronto cierre de los apostolados, ha marcado un tono distinto al ritmo del primer semestre.

El cierre del Colegio Máximo San José se avecina, con todas las implicancias positivas y difíciles que eso tiene.Ha sido significativo presenciar un hito tan relevante para la Provincia Argentina, como también el inicio de una nueva historia en Córdoba.