DiásporaSJ: Bogotá – Pablo Mayorga SJ
Pablo Mayorga SJ nos cuenta sus historias como estudiante de Artes Plásticas en Bogotá, junto con algunas pistas del reciente viaje del Papa Francisco a Colombia.
¡Qué gusto volver a escribirles por medio de este espacio (que me ha ayudado harto a saber de varios de ustedes)! Les cuento que yo estoy re bien, contento y muy agradecido de lo que ha sido, hasta la fecha, este primer año en Bogotá. En mi anterior relato les comenté un poco cómo fue mi experiencia de “mechón” en el CIF y la Javeriana. Ya con un semestre en el cuerpo, les puedo decir que, al menos en lo académico, esa sensación no ha cambiado mucho. “¿Por qué Pablo?” se preguntarán algunos de ustedes… la razón es muy simple: comencé, por fin, a cursar la carrera de Artes Plásticas.
La facultad de Artes es bella, buena y llena de personas, objetos y experiencias de lo más apasionantes. Aquí se reúnen estudiantes de música, artes escénicas y artes plásticas, por lo que el escenario es muy variopinto. El edificio que nos acoge es enorme y muy bien equipado, pero quizás lo que más me gusta son los pequeños detalles: los estudios de danza y teatro que son transparentes (por lo que puedes ver los ensayos), los estudiantes de música practicando en los pasillos y los muros de la zona de artes plásticas, que se transforman en lienzos gigantes donde muchos exhiben sus trabajos. Ha sido una experiencia muy gozosa y, a la vez, muy desafiante. He tenido que aprender un nuevo ritmo de estudio, vencer el pudor de presentar mis trabajos y, sobre todo, de lidiar con compañeritos al menos 10 años menores que yo (soy como el tata del curso). Con todo, he salido bastante bien parado y eso me tiene en paz.
En otros temas, les cuento que la visita del Papa por acá fue de mucha esperanza y consuelo. Francisco habló con pasión de temas y problemáticas que tocan el corazón de la sociedad colombiana, tuvo palabras acogedoras y cariñosas para las víctimas de la violencia, y discursos claros y enfáticos para las autoridades civiles y eclesiales (que más de un callo pisaron). Mi participación en la visita del Papa, en todo caso, fue nula: estuve todos esos días terminando mi primera entrega de dibujo. De hecho, el día que llegó Francisco y toda Bogotá estaba en las calles esperándolo, yo tuve que salir corriendo de la casa a comprar más papel porque había estropeado uno de los trabajos que tenía que entregar en dos días… pero así es la vida.
Bueno compañeros, un gusto contarles un poco de mi experiencia por estos lados, cuídense y que Dios los bendiga.